jueves, 27 de enero de 2011

Emmanuel Adebayor. 16 letras, una sola fe

Por Javier del Cid.

(Vía Galacticos 2.0.)

Emmanuel Adebayor. 16 letras, una sola fe.

Un pequeño niño nacido en Lomé, Togo, no podía caminar. Su madre, Alice Emiola, recorrió toda África en busca de un doctor que le dijera que le pasaba a su bebe, no encontraba respuesta. El joven niño tenía 4 años, y si seguía creciendo no podría caminar jamás. Estaba atado a ...una maldita silla de ruedas.

La madre acudió a la iglesia para que rezaran por su niño, y así, tal vez, el señor de los cielos, salvaría a su hijo. La gente empezó a rezar un domingo por la noche, llegó el sábado y no habían novedades. La madre se echo a llorar, no había remedio. Los familiares lo lamentaban, sabían que el pequeño tendría que pasar el resto de su vida en la silla de ruedas.

Eran las 9:30 AM, los niños togoleses jugaban una "chamusca", "cascarita", o partido amistoso. Sin querer, el balón ingresó en la capilla donde se encontraba la familia del desgraciado niño, y el chaval de 4 años.

La pelota rodó, nadie se paró a devolverla a la calle. Nadie, menos uno. Emmanuel, se estiró, tomó el balón y lo patió de regreso a la calle. El joven Emmanuel Adabayor caminaba por primera vez en su vida.

La madre besaba, abrazaba y gritaba de alegria al ver a su hijo caminar y patear una pelota. "Tu hijo está caminando, gracias al fútbol", le dijeron más de una vez.

Hoy en día, el pequeño Ema es jugador del Real Madrid, camina, juega al fútbol, mete goles, y cree en su Dios, "su creador".

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