Por Javier del Cid.
Con un ritmo de otro planeta y presionando desde el minuto 1' el Real Madrid consiguió su séptima victoria de manera consecutiva. El Villarreal que en su última visita a Madrid había sorprendido dos veces a los de Mourinho, hoy no existió y solo por el clásico enfriamiento en la segunda mitad del merengue, no se llevo cinco goles encima. El Madrid que venía de derrotar al Málaga en 45' minutos fantásticos, con hat trick de Ronaldo y uno de Gonzalo Higuaín, salió revolucionado y en menos de 5' Sergio Ramos había penetrado la portería amarilla, pero en claro off-side.
Fue un minuto después, cuando luego de una rápida recuperación de balón por parte del mismo Ramos, Di María metió el balón a la casa y Benzema, el buen gato de Mourinho, con una vaselina subió al marcador al Madrid. Punto para no olvidar: pronta recuperación y salida.
Pasaron otros cinco minutos y el segundo tanto se veía venir. Fue Kaká quien lo hizo, luego de un disparo desde la frontal del área, marcó su cuarto tanto de la temporada. Punto para no olvidar: Kaká ha vuelto, y si no ha vuelto, que no regrese.
El tercero llegaría tras un saque de esquina del Villarreal, increíblemente. Un cabezazo defensivo, Kaká toma el balón, conduce, toca, Marcelo cede a Benzema y este se anota una asistencia de gol. Ángel Di María marca con la zurda el 3-0, solo, ante la salida Diego López. Punto para no olvidar: rapidez, el Real Madrid es el mismo, pero parece distinto.
Media hora y tres goles para el cuadro de José Mourinho. Ronaldo se fue en blanco y en la estadística de MARCA no pudo marcar su gol 100 (caera en Anoeta).
En la segunda mitad el Villarreal no se atrevió, tan solo llenó de patadas a Xabi Alonso, que salió con una bella ovación del Bernabéu, que es su casa.
Pronta recuperación , Kaká inspirado y contra golpe...
El Madrid volverá.
Pronta recuperación , Kaká inspirado y contra golpe...
El Madrid volverá.
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